Seguidores

20 may 2014

Camarero... ¡una de breves!

----

Desde que el fin de semana pasado viera "Malditos Bastardos", el coronel Hans Landa ha entrado por méritos propios en la lista de los villanos más fascinantes del cine. Grandísimo personaje, fabulosos diálogos y una interpretación absolutamente impecable de un actor que también ha entrado en la lista de los actores a los que voy a seguirles la pista: Christoph Waltz. Sin él, no hay película (como reconoció Tarantino). Película que por momentos es algo grotesca con su violencia gratuitamente explícita y algunas situaciones inverosímiles, pero que solo por Landa hay que ver. Que nadie se pierda esa escena del capítulo uno... De hecho, me la voy a volver a poner.

----

¡¡17 años después tenemos una nueva entrega de Sandman, guionizada por el maestro Gaiman en persona!! Sandman: Obertura Parece que es una precuela al primero de los arcos argumentales de Sandman, publicado en 1988 (hace ya la friolera de 26 años). De momento el primer número tiene un dibujo impresionante y una historia que tiene muy buena pinta. 

----

Espero por el bien de Shalom Auslander (y su esposa) que en su libro Lamentaciones de un prepucio haya mucho de exageración y caricatura y no demasiado de autobiografía... O por lo menos espero que ya haya conseguido superarlo. Sea como sea, me hizo pasar un muy buen rato.

----

Grandísimo descubrimiento a través de Youtube de la música Steampunk. Creo que mi tema favorito es ese "Something Wicked That Way Went" de Vernian Process, inspirado en "La Feria de las Tinieblas" de Ray Bradbury y con un sonido que me recuerda a Pesadilla antes de Navidad. Sin embargo la historia de "The Doctor's wife" con un estilo musical muy de Broadway, es fantástica. Y la canción "The death of the Cog" criticando y maldiciendo a quien inventó el reloj digital, también muy buena (esta última sí suena más punk). Post temático a la una, a las dos....

----

Me temo que con las pascuas y demás, muchos se os pasó el último cuento de Alba. Pasaros ahora, nunca es tarde...

17 abr 2014

Los cuentos de Alba: Una niña muy especial

¡¡Muy buenas!! Alegrón para los fans de Alba, aquí teneis nuevo cuento. En esta ocasión, al ser sólo texto, me he limitado a transcribirlo. Es uno de los cuentos más largos que ha escrito y desde luego el más largo que he colgado. A mi (por supuesto) me ha gustado mucho, espero que a vosotros también, ha insistido mucho en que lo suba al blog. Alba ha hecho unos dibujitos aparte para adornar el post.

No me entretengo, os dejo con el cuento "Una niña muy especial", calentito calentito (lo escribió hace un par de semanas)

-----

Una niña muy especial


Esta historia trata de una niña llamada Candela que tenía 8 años, pero... no era una niña cualquiera sino una niña con autismo. Era una pena porque podría haber llegado a ser una niña muy lista y que conseguiría hacer todo lo que quisiera con esfuerzo. Pero las cosas pasan y hay cosas de la vida que no se borran. Pero aunque Candela tenía ese problema, ella siempre había intentado sobrepasarlo. Pero hay otra cosa que no os había contado y es que ella iba un colegio de niños normales.

Un día, mientras Candela iba al colegio, al entrar en clase su profesor les preguntó si alguien quería ir a las olimpiadas matemáticas. La sorpresa fue que... ¡sólo dos levantaron la mano! ¡Y una de ellas era Candela! La profesora como no tenía otra opción lo aceptó. Candela se puso muy contenta y todos los días por la tarde después de acabar sus tareas se ponía a practicar.


Llegó el día de la olimpiada matemática y ... 1,2,3 ¡Ya! Todos se pusieron a escribir y entregaron la hoja al final.

Candela estaba muy nerviosa y llegó el día en el que daban los resultados.

La sorpresa fue que.... ¡Candela pasó a la siguiente fase!

La profesora, sus padres y los alumnos se quedaron con la boca abierta ¡Vaya sorpresa se llevó Candela!

Bueno, esto sólo lo había conseguido con esfuerzo y ganas de hacerlo.

Lo que pasó es que la olimpiada se bloqueó y no podía seguir por unos fallos que habían tenido así que los que habían pasado a la siguiente fase tuvieron que esperar 2 o 3 años. Para Candela le pasó muy rápido y... ¡llegó el día!


Candela ya tençía 11 años para cumplir 12 y había estado practicando y repasando estos años con muchas ganas y esfuerzo. Lo hizo como pudo y llegaron los resultados y.... ¡CANDELA HABÍA QUEDADO 2ª! No se lo podía creer ni ella.. Todos se asombraron muchísimo y le dieron la enhorabuena. Fueron unos grandes momentos para ella. A lo largo de los años Candela había estado aprendiendo mucho hasta que llegó un año en el que tanto esfuerzo y tantas ganas y de todo... que se puso muy enferma.

Apenas podía moverse. Los médicos decían que se iba a morir. Candela ya no era una niña, tenía 19 años y estaba muy mal.

Sus padres estaban muy tristes y toda su familia también. Todos pensaban que podría haber llegado a ser una gran persona. Y quedó en coma unos meses.

Pero una noche muy iluminada por las estrellas Candela despertó y su madre y su padre se alegraron tanto que no sabían lo que hacer. Candela a la mañana siguiente no había olvidado nada, sabía hacerlo todo perfectamente.

¡Madre mía! ¡Candela ya no tenía autismo!


Candela llegó a ser la mejor médico de toda la ciudad y vivió feliz para siempre.





Fin

----

Espero que os haya gustado, si es así dejarle por favor algún comentario a Alba. Y os recuerdo que podeis ver el resto de los cuentos aquí: Los cuentos de Alba

10 abr 2014

Mis lecturas: cuando tenía 5 años, me maté

Hola a todos. Aquí, intentando recordar cómo era esto de escribir en el blog (espero que vosotros os acordeis de cómo llegar hasta aquí). De todas maneras, viendo las estadísticas de no-visitas (de lo que no puedo quejarme, ya que si no publico, ¿a qué vais a venir?) no pasará nada si se me nota el óxido en este post.

Bueno, pues quería hablaros de una editorial que descubrí hace unos meses, Blackie Books, y que tiene un catálogo muy poco convencional. Entre los libros que me he agenciado (y leido) recientemente están Netsuke, Lamentaciones de un prepucio (del que a lo mejor me animo a hablar) y el protagonista del post de hoy, "Cuando tenía 5 años, me maté", de Howard Buten.
El libro al parecer tuvo bastante éxito en francia tras su publicación y he de reconocer que a mi me enganchó desde la primera página.

Está narrado en primera persona por Burt, un niño de 8 años encerrado en una institución mental por algo que le hizo a una chica (ese algo no se desvela hasta el final del libro y aquí no lo vais a averiguar). El lenguaje usado, la peculiar y conflictiva personalidad del chico y sobre todo el profundo conocimiento que parece tener el autor (no en vano es psicólogo especialista en autismo) de los trastornos y conflictos que pasan los críos a esa edad lo hacen no sólo una lectura absorbente sino interesante, al tiempo que consigue que se llegue a un nivel de conexión y empatía con el chaval que hace que le eches mucho de menos al acabar la lectura.

No es un libro alegre, te deja un regusto algo amargo... pero es una gran lectura. Y ahora que parece la moda es escribir libros "a peso" con un mínimo de 500 páginas y en plan trilogías o tetralogías, leer una historia ágil, directa, sin florituras o rodeos absurdos, en menos de 200 páginas, es también de agradecer. Aunque tiene un lado malo: es difícil que te dure más de un fin de semana (al menos la lectura, el libro se queda en la cabeza bastante más tiempo)

Y Blackie Books una editorial a tener muy en cuenta, que conste.

El texto de contraportada, que casi se me olvida..

Burt sólo tiene ocho años, pero su pequeño corazón ya ha conocido grandes sentimientos. Demasiado grandes. Demasiado fuertes. Ahora vive recluido en un Centro de Internamiento Infantil por lo que le hizo a Jessica. Solo, contra la estupidez de los adultos que convierten sus sueños en síntomas clínicos y su amor en un delito. Solo, en una fortaleza de silencio. ¿Quién lo sacará de allí? Pura emoción, en una prosa maravillosamente conseguida

Y ya está por hoy. Lo que me ha costado escribir tras tanto tiempo....
Si te ha gustado, puede que te gusten: